Raleigh.- Los accidentes con un vehículo motor fueron el principal factor de muerte de menores entre 1 a 17 años en Carolina del Norte durante el 2017, según el reporte anual del Centro Estatal de Estadísticas de Salud de Carolina del Norte (NCDHHS) dado a conocer recientemente.

Las cifras analizadas por el North Carolina Child Fatality Task Force (Task Force)  indican que un total de 1,313 niños de 0 a 17 años murieron en el estado debido a una serie de causas como enfermedades, envenenamiento, suicidio, ahogamiento entre otros. De ese grupo 106 fueron de origen hispano.

Los condados Mecklenburg (110 muertes), Wake (102) y Guilford (90) son los que tienen más números de muertes de menores de 0 a 17 años. No se produjeron fallecimientos de niños durante el 2017 en Chowan, Jones, Tyrrell, Warren y Yancey

Pese a los números globales, la tasa de mortalidad mostró una ligera mejoría en comparación con los últimos años.  La media global de muertes de menores en 2017 fue de 57 por 100,000 niños de 0 a 17 años, que es la tasa más baja desde 2013.  En el 2016 el número de muertes global fue de 1,360.

“Muchas muertes se pueden prevenir a través de los programas y las leyes que abordan la salud y seguridad infantil”, indicó Karen McLeod, Presidenta del Task Force que forma parte de  una comisión de estudio legislativo creado en 1991.

 

Accidentes vehiculares

Para los niños de 1 a 17 años (excluyendo a los bebés), la principal causa de muerte son las lesiones causadas por vehículos motorizados.

Task Force, indicó que han ha estado trabajando para abordar las lesiones de vehículos de motor incluyen cerrar una brecha en las leyes estatales sobre el cinturón de seguridad y el fortalecimiento de una ley destinada a los conductores discapacitados.

 

Suicidios

En 2017, el suicidio fue la segunda causa de muerte entre los jóvenes de Carolina del Norte de 10 a 17 años.

Como los últimos tres años las recomendaciones de Tasa Force para el 2019 son: entrenamiento en prevención del suicidio en las escuelas; fondos estatales recurrentes para aumentar la número de enfermeras escolares y fondos estatales para una iniciativa de almacenamiento seguro de armas de fuego para ayudar a abordar el acceso a las armas por parte de niños y jóvenes.

De acuerdo con  Kella Hatcher, Directora Ejecutivo del Grupo de Trabajo, “los estudios muestran que la mayoría de las armas utilizadas por los jóvenes en un suicidio provienen de su propia casa o la de un pariente o amigo y que la mayoría de los tiradores escolares también obtienen armas desde su casa”.

En 2017, el 41% de los suicidios de jóvenes (18 de 44 suicidios) y el 47% de los homicidios de niños y jóvenes (26 de 55 homicidios) estaban relacionados con armas de fuego.

 

Muertes de bebés

Carolina del Norte, según el informe, tiene la decimosegunda tasa de mortalidad infantil, una mejora con respecto al 2015 donde ocupó el puesto número siete.

Al igual que en años anteriores, las muertes infantiles representaron casi dos tercios de todas las muertes infantiles en 2017. La tasa de mortalidad fue de 7.1 por 1.000 nacidos vivos, una cifra similar a la de los últimos años.

 

Disparidad étnica

En cuanto a las muertes por raza y etnia, la disparidad siguen permaneciendo, según indicó el informe. La tasa de mortalidad en 2017 para niños afroamericanos fue más  más del doble que los niños blancos.

“Para avanzar con las disparidades y las tasas de mortalidad infantil en general, es fundamental que lo hagamos mejor con los determinantes sociales de la salud. Temas como la pobreza, el racismo y el acceso a servicios de salud y cuidado infantil de calidad deben ser visto no solo como problemas de calidad de vida sino también como problemas de vida o muerte”, dijo la doctora Sarah Verbiest, copresidenta del Comité de Salud de Task Force.