Charlotte. - Los alguaciles de los condados más poblados de Carolina del Norte se presentaron en la Legislatura Estatal, ante el Comité Judicial del Senado, el miércoles 19 de junio, donde dijeron que el proyecto de ley HB 370, está orientado en contra de ellos.
“La HB 370 está claramente dirigida en contra de los recientemente elegidos sheriffs afroamericanos”, dijo el alguacil del condado de Mecklenburg, Garry McFadden, quien señalo que se está afectando a los sheriffs de los siete condados más poblados del estado a tomar medidas con las que no están de acuerdo.
El candidato a congresista y senador estatal calificó a los alguaciles de “sheriffs santuario” y los acusó de no proteger a sus comunidades.
Pero los alguaciles de Mecklenburg, Wake y Buncombe han expresado que se oponen al proyecto porque les mina la autoridad.
Durante el debate, el senador Floyd McKissick comentó que “no hay duda que esta clase de legislación está dirigida directamente hacia los alguaciles y que invade el la autoridad constitucional de aquellos alguaciles electos a dichas posiciones.
Los sheriffs, que no se adhirieron a la propuesta apoyada por la Asociación de Sheriffs de Carolina del Norte, han expresado que merecen respeto y que son simplemente alguaciles.
Los alguaciles del condado de Mecklenburg y Wake dieron varias las razones por cual no apoyan el proyecto HB 370. McFadden comentó que hubiera sido mejor que los representantes y senadores consultaran con ellos directamente en vez de consultar con la Asociación de Alguaciles. Explicó que en su condado se gasta 158 dolares al día para mantener a una persona bajo custodia federal.
Por su parte, Baker reitero que el trabajar con el gobierno federal 287(g) es opcional y al ser así, “él opto de no trabajar bajo dicho acuerdo”. El alguacil explicó que es el trabajo de ICE de esforzar su trabajo y no la labor de los alguaciles.
“El trabajo del alguacil es de tratar a todos residentes como seres humanos y con compasión”.
Durante el debate que duró unos 45 minutos, el Senador Destin Hall , recpublicano del condado de Caldwell), patrocinador principal del proyecto, dijo que la propuesta representa una protección de seguridad pública para las víctimas e inocentes en Carolina del Norte.
La HB 370 requiere que las oficinas de sheriff determinen el estatus migratorio de cualquier persona que haya sido arrestada por cualquier cargo criminal, y que notifique a ICE.
Además obliga que los alguaciles honren las órdenes de detención de ICE, incluso si la persona arrestada es elegible para ser liberada bajo las leyes de Carolina del Norte.
Expone a las ciudades, condados y agencias de aplicación de la ley a litigios al permitir que cualquier persona lleve a su gobierno local a los tribunales si creen que está impidiendo la aplicación de leyes de inmigración o violando las leyes estatales de la inmigración.
No obstante, el proyecto fue aprobado por la Cámara de Representantes y ha avanzado en el Senado sin inconvenientes.
Lo único probablemente lo atajaría de ser ley en una Legislatura de mayoría republicana, es el veto del gobernador demócrata, Roy Cooper.